Clasicismo (2 parte)

Cesar Cui

Tsézar Antónovich Kyuí (Це́зарь Анто́нович Кюи́), más conocido como César Cui (Vilna, 18 de enero de 1835 — San Petersburgo, 26 de marzo de 1918), fue un compositor y militar ruso.

Cuí era hijo de una mujer noble lituana y un ofical francés que se quedó en Rusia tras la retirada del ejército de Napoleón. Ninguno tenía interés por la música y Cuí aprendió por sí solo notación musical y piano. En 1849 recibió algunas lecciones de armonía y contrapunto del compositor polaco Stanisław Moniuszko, quien vivía por entonces en Vilnius.

Al año siguiente fue enviado a San Petersburgo e ingresó en la Escuela de Ingeniería. Más tarde asistió a la Academia de Ingeniería Militar y se graduó en 1857, llegando a ser topógrafo y un reconocido experto en fortificaciones militares.

Cuí trabajó toda su vida como ingeniero llegando a ser Teniente General de Ingenieros. En 1878 fue nombrado profesor en la Escuela de Ingeniería y por un tiempo fue el tutor privado del Zar Nicolás II en fortificaciones.

En 1864 comenzó a escribir críticas musicales para los periódicos y se hizo conocido en los círculos musicales por su oposición a la música occidental, sobre todo la de Max Reger y la de Richard Strauss. Esto condujo a su asociación con el pequeño grupo de compositores rusos que intentaba crear un estilo musical verdaderamente ruso basado en las ideas nacionalistas de Mijaíl Glinka.

Cuí conoció a Mili Balákirev en 1856 y poco después se hizo amigo de Aleksandr Borodín, Músorgski y Rimski-Kórsakov. Desde entonces mantuvo una cercana relación con el grupo, conocido como el Grupo de los cinco, cumpliendo sobre todo el rol de propagandista y teórico en los esfuerzos por establecer un idioma musical nacional. Cuí fue la primera persona en publicar un ilustrativo libro sobre música rusa y siguió escribiendo como crítico hasta 1900.

En sus composiciones Cuí fue influido por Balákirev. Mostró mejor talento como miniaturista que como compositor de grandes partituras. Aunque escribió varias óperas, entre ellas El prisionero del Cáucaso (1857), El hijo del mandarín (1859) o La hija del capitán (1911), ninguna fue tan exitosa como otras partituras suyas. la mayor parte de su producción consiste en canciones y pequeñas piezas para piano, pero también compuso música orquestal.

Por lo que se refiere a la consideración actual de Cui como compositor, en las últimas décadas una de sus óperas para niños (de las que compuso cuatro) titulada El gato con botas (de Perrault) han alcanzado gran atractivo en Alemania.[1] A pesar de todo, con independencia del hecho de que más de la música de Cui se ha hecho disponible en años recientes en grabaciones y en nuevas ediciones impresas, su estatus hoy en día en el repertorio es considerablemente pequeño, basado (en Occidente) principalmente en algunas de sus obras para piano y música de cámara (como la pieza para violín y piano llamada Orientale (op. 50, No. 9)[2] ) y una serie de canciones solo. Aunque sus habilidades como orquestador han sido menospreciadas (especialmente por su compatriota Rimski-Korsakov[3] ), algunas grabaciones recientes (por ejemplo de su ópera en un acto Fiesta durante la plaga,[4] basada en Pushkin) sugiere que la música dramática de Cui puede ser muy interesante de seguir en relación con este rasgo.

Obras

El hijo de mandarín

El prisionero del Caucaso

Angelo

La hiha del capitán

Matteo Falcone


Smetana

Bedřich Smetana (pronunciado Acerca de este sonido [ˈbɛdr̝ɪx ˈsmɛtana] ; 2 de marzo de 182412 de mayo de 1884) fue un compositor checo pionero en el desarrollo de un estilo musical que quedó íntimamente ligado a las aspiraciones independentistas de su país. Por ello, se lo reconoce en su país como el padre de la música checa. Internacionalmente es conocido por su ópera La novia vendida y por el ciclo de poemas sinfónicos Má vlast (‘Mi patria’) que representan la historia, leyendas y paisajes de la patria natal del compositor.
Smetana poseía un talento natural para el piano y dio su primer recital a los seis años. Tras recibir una educación convencional en la escuela, estudió música con Josef Proksch en Praga. Escribió su primera composición nacionalista durante el levantamiento de Praga de 1848, en el que participó por poco tiempo. Ante la imposibilidad de iniciar su carrera en Praga, se dirigió a Suecia, donde se estableció como profesor y director de coro en Gotemburgo y empezó a escribir obras orquestales de gran escala. Durante este periodo de su vida, Smetana se casó dos veces y tuvo seis hijos, de los cuales tres fallecieron durante su infancia.
A principios de la década de 1860 un clima político más liberal en Bohemia alentó a Smetana a regresar permanentemente a Praga. Se entregó a la vida musical de la ciudad, principalmente como defensor del nuevo género de la ópera checa. En 1866 sus dos primeras óperas, Los brandenburgueses en Bohemia y La novia vendida, fueron estrenadas en el nuevo Teatro Provisional de Praga, alcanzando esta última gran popularidad. Ese mismo año, Smetana llegó a ser el director principal del teatro, pero los años de su dirección estuvieron marcados por la polémica. Las facciones encargadas de la creación musical de la ciudad consideraban que su identificación con las ideas progresistas de Franz Liszt y Richard Wagner eran hostiles al desarrollo de un estilo de ópera checa distintivo. Esta oposición interfirió con su trabajo creativo y pudo haber acelerado la degradación de su salud, precipitando su dimisión del teatro en 1874.
A finales de 1874, a los 50 años de edad, Smetana se volvió completamente sordo, pero, liberado de sus funciones de teatro y la polémica que causaba, comenzó un período de composición constante que se prolongó durante casi todo el resto de su vida. Sus contribuciones a la música checa iban siendo cada vez más reconocidas y respetadas, pero un colapso mental a principios de 1884 condujo a su internamiento en un asilo y su posterior fallecimiento. La reputación de Smetana como el padre fundador de la música checa se ha fortalecido en su país natal, donde los defensores lo han convertido en icono por encima de sus contemporáneos y sucesores. Sin embargo, relativamente pocas de las obras de Smetana se encuentran en el repertorio internacional y la mayoría de los expertos extranjeros tienden a considerar a Antonín Dvořák como el compositor checo más importante.


Obras

Los brandes burgueses en Bohemia

La novia vendida

Delibor

Libuse

Las dos viudas